Las pruebas epigenéticas como herramienta del deporte
Las pruebas epigenéticas se han convertido en una herramienta emergente dentro del campo de la medicina deportiva, permitiendo una comprensión más profunda de cómo el entrenamiento, la nutrición y el estilo de vida impactan a nivel molecular en el rendimiento y la salud del atleta. A diferencia de la genética, que se centra en la secuencia heredada del ADN, la epigenética estudia modificaciones reversibles que no alteran esa secuencia, pero que influyen en qué genes se activan o desactivan. Estas modificaciones como la metilación del ADN y la modificación de histonas funcionan como interruptores moleculares que pueden potenciar o limitar funciones celulares clave. Su aparición no es aleatoria, sino que responde a estímulos como el ejercicio físico, la alimentación o el descanso, convirtiéndose en un mecanismo clave de adaptación biológica (Mazzio y Soliman, 2012).
En el contexto deportivo, las pruebas epigenéticas analizan estas marcas a partir de muestras como saliva o sangre, lo que permite conocer de forma individualizada la respuesta del organismo al entrenamiento, su capacidad de recuperación, la susceptibilidad a lesiones, el grado de estrés fisiológico y hasta la llamada “edad epigenética”. Esta última, en particular, se ha empezado a utilizar como biomarcador para monitorear el impacto acumulado del ejercicio extenuante sobre el envejecimiento celular en atletas profesionales, y ajustar las cargas de trabajo de manera más precisa (Fathi et al., 2024).
Otro aspecto de relevancia es la relación entre epigenética y nutrición, ya que los nutrientes tienen la capacidad de modular la expresión génica. Esto ha dado paso al desarrollo de la nutrigenómica, cuyo objetivo es diseñar planes alimentarios personalizados con base en el perfil epigenético de cada individuo. Por ejemplo, la disponibilidad o deficiencia de ciertos micronutrientes puede influir en procesos como la síntesis de energía, la respuesta inflamatoria o el metabolismo del oxígeno, todos fundamentales en el rendimiento deportivo (Rasmussen et al., 2021).
También se ha reportado que el ejercicio induce una extensa remodelación epigenética en tejidos musculares, cardíacos y conectivos. Estos cambios moleculares han sido vinculados con mejoras en la función mitocondrial, la plasticidad muscular, y la adaptación cardiovascular, lo que demuestra que el entrenamiento no solo mejora la condición física, sino que también reprograma el cuerpo a nivel epigenético para responder mejor a futuras demandas físicas (Radak et al., 2021; Flegaitis et al., 2021).
Además de su aplicación en el rendimiento, las pruebas epigenéticas también han mostrado utilidad en la prevención y monitoreo de lesiones. Se han identificado alteraciones epigenéticas en músculos y tendones asociadas con procesos inflamatorios posteriores a lesiones deportivas, lo que sugiere que podrían emplearse como biomarcadores tempranos para prevenir recaídas o adaptar el proceso de rehabilitación (Foti et al., 2022). Incluso en el ámbito ético y regulatorio, ya se han planteado debates sobre el uso potencial de la manipulación genética o epigenética para mejorar el rendimiento, lo que subraya la necesidad de establecer lineamientos claros sobre el uso responsable de esta tecnología en el deporte (de Camargo et al., 2012).
En conclusión, las pruebas epigenéticas representan una herramienta poderosa y prometedora para individualizar el entrenamiento, la nutrición y la recuperación de los atletas. Su capacidad para traducir información molecular en decisiones prácticas de intervención posiciona a la epigenética como una pieza clave en la evolución hacia una medicina deportiva de precisión. Sin embargo, aún es necesario validar su aplicación con estudios clínicos robustos, desarrollar marcos éticos sólidos y garantizar la interpretación adecuada de los datos antes de su implementación generalizada.
Por el Mtro. José Roberto Esparza
Docente de la Licenciatura en Nutrición
Referencias:
[1] [1] Mazzio EA, Soliman KFA. Basic concepts of epigenetics: Impact of environmental signals on gene expression. Epigenetics. 2012 Feb;7(2):119-30.
[2] Radak Z, et al. The epigenetic landscape of exercise in cardiac health and disease. Heart Fail Rev. 2021;26(1):15-28.
[3] Flegaitis R, et al. Epigenetic Modifications as Outcomes of Exercise. Folia Biologica. 2021;12(1-6):25-34.
[4] Torres R, et al. Genetic factors associated to sports performance. GSC Adv Res Rev. 2024;19(03):040–044.
[5] Rasmussen J, et al. The Impact of Lifestyle, Diet and Physical Activity on Epigenetic Changes in the Offspring—A Systematic Review. Nutrients. 2021;13(8):2821.
[6] de Camargo L, et al. The use of genes for performance enhancement: doping or therapy? Braz J Med Biol Res. 2012;45(1):1-7.
[7] Fathi M, et al. Epigenetic Age Monitoring in Professional Soccer Players for Tracking Recovery and the Effects of Strenuous Exercise. medRxiv. 2024; 2024.11.28.24317877. (Preprint. No ha sido certificado por revisión por pares).
[8] Foti S, et al. Epigenetic Alterations as a Consequence of Sports-Related Injuries—A Review. Genes. 2022;13(8):1471.