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INTI

La importancia de la Institución

Al inicio de los noventa, el mundo aceptaba las aportaciones de crear una institución en la mejora de las relaciones económicas. El primer acontecimiento visible sucede en 1991, cuando se otorgó el Premio Nobel de Economía a Ronald Coase. Este autor postula que los precios en los mercados se modifican debido a sobrecostos.

 

Un ejemplo claro lo podemos encontrar en los trámites burocráticos que enfrentan las empresas a diario, así mismo, el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) menciona los altos índices de violencia e inseguridad como uno de los principales inconvenientes de la competitividad de las empresas mexicanas.

 

De esta manera, Coase incorpora en el análisis económico la problemática de los “costos de transacción”, es decir, aquellos arreglos que permitan que se cumplan todas las “reglas del juego” entre los agentes (hacer contratos, inspecciones, resolver desacuerdos, etc.), haciendo que los sobrecostos se reduzcan.

 

Ante lo anterior cabe preguntarse, ¿qué debe ocurrir para que esto se cumpla en términos reales? La respuesta surge en una estructura institucional fuerte e independiente que garantice el cumplimiento de estos contratos.

 

Posteriormente, en 1993 se otorga el Premio Nobel de Economía a Douglas North por sus aportes, entre los más destacables, en la profundización del análisis de la institución y su impacto en el desarrollo de los países.

 

Para North el tema de la institución es más complejo, definiendo que son parte de toda una estructura de incentivos que establece, modifica y perfila una sociedad. Describe el proceso institucional como una entidad “viva” compuesta por la conducta de los agentes en realizar lo correcto y capaz de autocorregirse, siguiendo los parámetros de la institución.

 

En este sentido, es mejor seguir la analogía que North utiliza en su discurso del Nobel: Institución es a reglas del juego, como las organizaciones y empleados son a los jugadores. Al respecto, desarrolla una clasificación que consta de cuatro tipos de organismos que en su conjunto representan a la institución, que se muestran en la figura (imagen de esta nota).

Figura: Organismos de la institución, adaptado para el caso mexicano. Fuente: Discurso Nobel de Douglas North (1993)

 

Para 2014, Jean Tirole recibió el Nobel por sus aplicaciones económicas a los organismos políticos (reguladoras) y su forma de reasignar el beneficio social a los mercados, es decir, la idea de fortalecer los organismos políticos tomaba fuerza. Por tanto, la institución no se reduce a simples espacios físicos o personas en particular, si no que reúne acuerdos y pactos a los que llegan los distintos organismos que la constituyen.

 

Se suele decir que los países que progresan cuentan con una institución sólida, cabe preguntarse: ¿porque se distinguen las instituciones entre países?, ¿estará bien dirigir todas las críticas sobre ellas?

 

Para entenderlo, utilicemos el caso de evasión tributaria: la institución indica que se debe pagar impuestos, sin embargo, si los organismos no cumplen con utilizar adecuadamente (como se pactaron) dichos recursos, la institución se debilita y se toma como una elección correcta el evadir. Entonces, el fallo no está en la institución, está en su estructura, uno de sus organismos no está enviando las señales correctas para que los agentes tomen correctamente sus decisiones acordes al objetivo de la institución.

 

Una revisión comprometida con el problema, sería analizar críticamente cada uno de los organismos con la finalidad de reforzarlo y encaminarla a los objetivos correctos de la sociedad. Si prima la corrupción, mentira, injusticia y demás elementos negativos dentro de un organismo, la institución se dañará irremediablemente.

 

Un buen camino para tomar como líderes de acción positiva sería que cada uno de nosotros reflexionara desde el organismo que representamos, identifiquemos las fallas y colaboremos en encausarlo hacia lo correcto, como indica North, el papel de la institución es vital, no depende de alguien o un espacio físico en específico, porque es el reflejo del actuar de una sociedad en su conjunto. Lo contrario, no aportaría a solventar una sociedad que busca crear una institución fuerte para su desarrollo sostenido.


 

Por el Dr. Manuel Tregear

Docente investigador de la Escuela de Economía y Negocios