Emprendimiento: En busca de oportunidades

Un artículo sobre lo que significa el emprendimiento, la importancia de tener una buena idea y cómo saber llevarla a cabo.

El Centro de Emprendimiento Universitario (CEU) de la Universidad Anáhuac México nos comparte un texto de Iñaki Saiz Cueto, director general de A de Coco, sobre emprendimiento y lo que buscan quienes quieren emprender.

Emprendimiento: En busca de oportunidades

Emprender parece que se ha convertido en una moda que crece como la espuma de las cervezas artesanales en la que todos vemos el emprendimiento como una forma atractiva de ganarnos la vida desde el aspecto económico, pero también de cara a la sociedad.

Todos queremos emprender, ya sea en un salón de clases nutrido de alumnos ávidos por encontrar el éxito profesional y personal, como en una sala de juntas llena de empleados con más de 10 años de experiencia laboral. Todos compartimos una misma inquietud. 

Emprender nos ayuda a cubrir nuestras necesidades económicas, pero también a cubrir aquellas que tienen que ver con trascender. Una empresa se convierte en el soporte económico de las familias de nuestros empleados y acerca mejores productos o servicios a más consumidores, creando así valor para nuestra sociedad y plenitud profesional para el emprendedor.

La falta de una buena idea de negocio, de no saber cómo llevar a la realidad esa oportunidad de manera rentable o realmente no querer tomar la decisión de hacerlo –con todo lo que implica– son las principales razones o, en algunos casos, los pretextos que la gente tiene para decidir no emprender.

Si realmente hoy tuviéramos nuestra mente en blanco, suficientes recursos económicos y la disposición de trabajar en desarrollar una idea de negocio, ¿por dónde empezaríamos?, ¿qué deberíamos analizar primero? 

Las aproximaciones a metodologías existentes son poco exhaustivas, parten de un claro subjetivismo y dependen de la capacidad de la persona que los utilice para llegar a una buena conclusión.

También está la decisión personal que cada uno debe tomar entendiendo y analizando el contexto de su situación e intereses. Tal vez lo más determinante se refiere a que las dos primeras no sean en realidad un verdadero impedimento para comenzar a emprender de manera exitosa. En este artículo nos centraremos en el primero:

¿Cómo encontrar una buena idea de negocio?
Para empezar, hay que dejar claro una cosa: la idea es la que crea la oportunidad de negocio, no al revés. Un problema, una idea. La idea siempre debe resolver una problemática. Entre mayor sea esta, mayor será la probabilidad de que la idea sea buena, de alto impacto a la sociedad y, por ende, rentable. Entonces surge la pregunta que todos nos hacemos:

 

¿Cómo puedo encontrar una buena idea de negocio? 

¿Qué metodología propone la academia para lograrlo?

A diferencia de muchas otras materias y temas, la academia ha abordado poco las metodologías para identificar oportunidades de negocio. Es posible encontrar algunos artículos que presenten de manera escueta aproximaciones a la forma de encontrar ideas de negocio. 

Si realmente hoy tuviéramos nuestra mente en blanco, suficientes recursos económicos y la disposición de trabajar en desarrollar una idea de negocio, ¿por dónde empezaríamos?, ¿qué deberíamos analizar primero? 

La realidad es que no existe una metodología clara, probada y metódica para solucionar el cuestionamiento más común que enfrentamos como sociedad: ¿Cómo identificar una oportunidad de negocio para poner todo mi conocimiento, experiencia y esfuerzo en convertirla en realidad? Las aproximaciones a metodologías existentes son poco exhaustivas, parten de un claro subjetivismo y dependen de la capacidad de la persona que los utilice para llegar a una buena conclusión. Lo anterior demuestra que no hay una metodología perfecta que nos diga exactamente qué debemos hacer, sino que solamente podemos contar con aproximaciones que nos ayudan a ordenar y orientar nuestro pensamiento para encontrar aquello que buscamos.

¿En dónde podemos encontrar entonces las oportunidades de negocio? ¿Cómo podemos realizar una aproximación metódica que nos dé éxito en la tarea o por lo menos nos ayude a mejorar nuestras probabilidades? La respuesta siempre estará en la construcción de insights o conocimientos específicos sobre nuestro contexto y clientes. Entender y analizar los ciclos económicos en los que nos encontramos y las tendencias sociales, demográficas, culturales y políticas deberán ser la principal fuente de información para construir nuestras hipótesis. 

Solo partiendo de esta construcción de insights es como podremos identificar oportunidades de negocio, sin cegarnos a las primeras ideas que se nos ocurran por generación espontánea. En próximos artículos podremos profundizar más en una metodología para encontrar nuestra idea de negocio ideal.
 

Dos opciones
Para responder a las preguntas ¿para qué debemos realizar algún análisis?, ¿no deberíamos dedicarnos de lleno en convertir la idea en una realidad? Analicemos las aproximaciones a metodologías más comunes:

Basada en los clientes
Una idea de negocio nace para resolver un problema y aprovechar una oportunidad; un problema nace de una necesidad no satisfecha –o aún no descubierta– de una persona (o de varias). Si queremos encontrar una idea de negocio, esta metodología propone empezar por conocer a nuestros clientes potenciales. Se trata de identificar un problema poniendo al cliente como centro de todo y cuestionar qué más podemos hacer por él una vez que encontramos necesidades no satisfechas, no conocidas o que mejoren los productos y servicios que actualmente utiliza.

Basada en la creatividad
Esta metodología parte del supuesto de que, con base en nuestras vivencias personales y profesionales, sumadas a nuestra creatividad podemos encontrar una buena idea de negocio, independientemente del problema, a través de una lluvia de ideas y un análisis posterior del cual nos resulta una mejor idea.

*Este reportaje forma parte de la Revista de Negocios y Economía Anáhuac. Para conocer la publicación completa da clic aquí.

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