Este reconocimiento lo recibió, dentro del XXX Congreso Nacional de Actuarios, por su trabajo de investigación “Cómo evitar que la industria petrolera se quede sin seguros”.
El pasado 26 de marzo, en el marco de la cena de clausura del XXX Congreso Nacional de Actuarios celebrado en la ciudad de Oaxaca, Oaxaca, el doctor José Daniel López Barrientos (Actuaría, gen. ‘03), profesor-investigador de nuestra Facultad de Ciencias Actuariales, recibió el primer lugar en la segunda edición del Premio Fundadores de la Asociación Mexicana de Actuarios (AMA) por su trabajo de investigación titulado “Cómo evitar que la industria petrolera se quede sin seguros”.
Dicho reconocimiento fue entregado por la presidenta de la AMA, la actuaria Sandra Gallegos Gallardo, así como por el presidente del Colegio Nacional de Actuarios, el actuario Alejandro Turner Hurtado.
El trabajo está construido sobre los cimientos de cuatro investigaciones previas del doctor López Barrientos y utiliza técnicas clásicas de programación dinámica estocástica para determinar la prima de equivalencia que cada uno de dos agentes extractores de un recurso natural no renovable debe pagar a una aseguradora para cubrir el riesgo de que un poro de extracción explote en las aguas profundas del golfo de México.
También usa métodos estadísticos y geológicos para calibrar la distribución del tiempo hasta el fallo del estatus de extracción de cada agente y conjunta un sencillo esquema de aproximación con el estándar actuarial de las recomendaciones de Bühlmann para cobrar a los agentes extractores una prima de varianza, mientras que la aseguradora obtiene un rédito por su inversión en riesgo.
El concurso contó con la participación de actuarios de todo el país y el jurado evaluador estuvo compuesto por el Consejo Técnico de la AMA y por dictaminadores expertos en materia de seguros, quienes evaluaron la aportación y aplicación de los trabajos a la práctica en el sector de seguros; el balance entre los aspectos teóricos, empíricos y prácticos de las hipótesis y las metodologías actuariales; el estilo, redacción y presentación; la contribución a la innovación y a una mayor penetración del seguro en la cultura mexicana; así como la pertinencia y la originalidad del tema desarrollado.
Cabe destacar que el proceso de evaluación siguió la metodología “doble ciego”. De modo que, ni los evaluadores, ni los evaluados conocían la identidad de sus respectivas contrapartes. El seudónimo que el doctor López Barrientos usó fue “Atrina Maura”, que es el nombre científico del “Callo de Hacha”. Este molusco puede encontrarse en los estuarios, los bancos de arena o entre el fango en bahías y lagunas costeras del Océano Pacífico. Por este motivo, es difícil que estos bivalvos lleguen a peligrar por las actividades de explotación (y explosión) del hidrocarburo en el Golfo de México.
Más información:
Facultad de Ciencias Actuariales
Lic. Marcela Lucía Zamudio Rosas
marcela.zamudio@anahuac.mx