PetStares la empresa que cuenta con la planta de reciclado de PET grado alimenticio más grande del mundo, donde a través de un innovador modelo de negocio sustentable genera valor social, ambiental y económico, con lo que complementa los tres pilares de la sustentabilidad.
El reciclaje es una actividad valiosa y necesaria para la supervivencia de la humanidad, ya que el desarrollo económico en el mundo ha estado basado en una economía lineal, en donde se toman recursos del planeta, se transforman, se utilizan y se desechan, sin embargo el mundo ya no da para eso, por lo que el modelo de PetStar se basa en la economía circular, la cual implica aprovechar los recursos naturales reincorporándolos permanentemente al proceso. Así, los envases que se reciclan regresan a ser botellas, un claro ejemplo es la azul de Ciel, hecha 100% de otras botellas.
Mediante la conservación del medio ambiente, PetStar produce su resina reciclada grado alimenticio de alta calidad que compite con el precio de la resina virgen, generando valor económico a sus clientes.
LOS PRÓXIMOS RETOS
PetStar se ha planteado objetivos ambientales muy retadores para el año 2020; pretenden neutralizar su huella de carbono, así como su huella hídrica, ser una empresa “zero waste”, con cero fugas de plástico al medio ambiente y que no utilice papel en sus procesos. El principal reto es demostrar que se puede reciclar con altísimos estándares de calidad, generando valor social, ambiental y económico, buscando ser una fuente de inspiración para otros.
Comprometidos con la sustentabilidad de sus envases, este año Coca-Cola lanzó a nivel global un proyecto llamado “World Without Waste” con lo que pretende para el año 2030 recolectar el equivalente a todas sus botellas e incorporar hasta 50% de material reciclado en sus envases.
“PetStar busca ser un referente global en reciclaje de PET grado alimenticio, así como demostrar que la economía circular es factible social, ambiental y económicamente”, comentó Jaime Cámara, fundador y director general de PetStar quien, en 1998 fue invitado a ser presidente de APREPET, en donde surgió la visión de involucrar a las industrias embotelladoras.
LOS PROCESOS
Se dividen en dos: acopio y reciclado. La división de acopio cuenta con ocho plantas a nivel nacional, desde donde se atienden 1,200 puntos de recolección y se compra material a granel, se lleva a las plantas de acopio y ahí se separan en bandas de clasificación, posteriormente se compacta en pacas que se transportan a la planta de reciclaje.
La división de reciclado cuenta con una planta en Toluca, en donde se lleva a cabo el lavado y molienda: se cortan las botellas en pedacitos, se lavan y pasan por la fase de extrusión. En esta etapa, el material se funde y se convierte en una especie de filamentos, se corta y se hacen pequeños cilindros llamados pellets. Por último, se les da un tratamiento térmico de purificación para remover todos los elementos que puedan estar en la superficie quedando en estado inocuo, es decir, que no afecte ni la salud, ni el sabor, lo que significa que el material sea de grado alimenticio.
Ya purificado, los fabricantes de botellas lo mezclan en diferentes porcentajes, con resina virgen, y se hace una preforma, la cual se transporta a las embotelladoras, en donde se sopla para darles forma, se llena, se etiqueta y se distribuye.
El 6 de junio de 2018, PetStar recibió el Premio Nacional de Calidad de manos del Presidente de la República, Lic. Enrique Peña Nieto.
RESPONSABILIDAD SOCIAL
PetStar busca darles certidumbre a los recuperadores y pepenadores de PET con los que trabaja, promoviendo la movilidad social e inclusión de este sector, por lo que cuenta con un Modelo de Acopio Inclusivo PetStar (MAIP). Un claro ejemplo de esta labor, es el Centro de Educación y Desarrollo Infantil Comunitario (CEDIC) ubicado en Chimalhucán, Estado de México, en el que se atienden a 400 niños y niñas, hijos de pepenadores, ofreciendo servicios de educación, alimentación y salud.
UNA EMPRESA PREMIADA Y RECONOCIDA
Este 2018, PetStar fue galardonada con el Premio Nacional de Calidad, el cual reconoce a empresas que se distinguen por la calidad e innovación de su administración, como sustento de una cultura de excelencia que impulsa su competitividad. Con este reconocimiento, se distingue como líder a nivel global en el reciclaje de PET grado alimenticio, coadyuvando al liderazgo de México en este sector.
RESPONSABILIDAD COMPARTIDA
PetStar promueve el concepto de responsabilidad compartida entre la sociedad, autoridades y empresas privadas. El consumidor juega un papel relevante para recuperar el material mediante la correcta disposición de la botella siguiendo cuatro pasos:
- Vacía
- Aplasta
- Cierra
- Deposita
Estas son acciones simples con un alto valor ambiental. Además, para hacer factible la recuperación de materiales se debe contar con el apoyo y compromiso de la industria, en este caso, la industria mexicana de Coca-Cola incorpora contenido reciclado en sus empaques todos los días promoviendo su recuperación.
Por último, el gobierno debe legislar para incentivar la industria del reciclaje, así como promover y gestionar la separación de los residuos, además de su manejo y correcta disposición final.
EDUCACIÓN
PetStar cuenta con un Museo Auditorio que a través de un programa de visitas recibe a más de 14,000 personas al año, buscando generar una conciencia ambiental.
Este espacio es amigable con el medio ambiente, cuenta con un sistema de captación y tratamiento de agua de lluvia, paneles solares, azotea verde, entre otras prácticas que favorecen al entorno, y con la Certificación LEED Platinum (Leadership in Energy & Environmental Design) como un edificio sustentable, convirtiéndose en el primer museo en Latinoamérica en lograr este nivel de certificación.