Para una mejor relación familiar, un buen diálogo

Un artículo del Centro Psicopedagógico Anáhuac en el que se muestra cómo los padres son los primeros y únicos responsables de las relaciones y la comunicación que se dé en el entorno familiar.

El Centro Psicopedagógico Anáhuac, a través de su Clínica Anáhuac Cenyeliztli, comparte un artículo de la licenciada Marisol Gómez García quien brinda una serie de claves para mantener un diálogo asertivo y eficaz.

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Para una mejor relación familiar, un buen diálogo

El diálogo padres e hijos debe ser de corazón a corazón. Es con el diálogo asertivo y amoroso que lograremos acercarnos y unir a nuestra familia. Este es el que nos permitirá descubrirnos, amarnos y respetarnos encontrando juntos un camino común.
 

Los padres somos los primeros y únicos responsables de las relaciones y la comunicación que se dé dentro de nuestra familia. Porque somos nosotros los que les enseñamos a dialogar a los hijos a través del ejemplo que les damos día con día.
 

Nuestras acciones enseñan más que las palabras.

Dentro del grupo familiar:

•    La televisión
•    Las actividades profesionales y sociales que nos dejan poco tiempo.
•    El miedo a darnos a conocer tal cual somos.
•    El desánimo que se siente al ver que nunca se les da gusto a los demás, sobre todo a los hijos adolescentes, etc.

Es importante que cada uno hagamos un análisis profundo buscando encontrar qué es lo que obstaculiza el buen diálogo en nuestro hogar.

Ya que lo identifiquemos hay que trabajar juntos para resolver o evitar ese obstáculo.

Para que exista diálogo padre e hijo es necesario que la iniciativa sea nuestra, estando siempre abiertos y disponibles para ellos, contándoles de nosotros y de nuestra vida. Solo dialogaremos si nos acercamos a platicarles de nosotros y nos interesamos en sus cosas. Estar siempre dispuestos a escucharlos es la mejor forma de demostrarles nuestro interés y amor.

Es importante ser modelos para nuestros hijos. Cuando los hijos no nos admiran o respetan, no tienen el deseo de contarnos sus cosas o de que nosotros lo hagamos. Nunca exigir más de lo que ofrecemos porque esto genera rabia. Un gran diálogo solo se da entre personas que se respetan y se admiran.

Claves para mantener un diálogo asertivo y eficaz:

•    Oportuno, esperar el mejor momento y cuidar el modo.
•    Respetuoso, tratar con dignidad y no ofender.
•    Sereno, confiar que todo va a estar bien y no dramatizar.
•    Inteligente, entrar al tema poco a poco para no violentar.
•    Provocador, buscar que reflexionemos sobre su conducta y sus consecuencias, pero de manera inteligente.
•    Alternado, tiempo para hablar y escuchar.
•    Valiente, ser firme, pero comprensivo.
•    Franco, hablar siempre con la verdad y sin máscaras.
•    Cálido, demostrar cariño y afecto.

Al mejorar nuestro diálogo, además de acercarnos, los preparamos para el futuro.

*Marisol Gómez García, licenciada en Administración y Finanzas y máster en Educación. Autora de varias publicaciones.

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El Centro Psicopedagógico Anáhuac, integrado por la Clínica Anáhuac Cenyeliztli, la Coordinación de Orientación Vocacional Anáhuac y el Programa de Apoyo al Estudiante (PAE) de nuestra Universidad, tiene como misión atender y mejorar la salud mental de alumnos, profesores, personal administrativo, egresados y público en general. Trabaja en favor de la salud y del bienestar de las personas y familias mexicanas en proyectos formativos, de intervención y de servicio a la sociedad.