“El carácter es aquello que te saca adelante”: Ninfa Salinas Sada

La presidenta de Fundación Azteca y vicepresidenta de Grupo Salinas habló sobre el fracaso, la educación, la confianza y la comunicación para alcanzar el éxito.  

Ninfa Salinas Sada (Economía y Negocios, gen. ‘03), vicepresidenta de Grupo Salinas y presidenta de Fundación Azteca, nos recibió en sus oficinas, donde habló de lo orgullosa que está de todos los proyectos y logros que ha tenido la fundación cuya iniciativa busca educar para cambiar la mentalidad de las personas y poder tener un país distinto.

Nuestra egresada, quien señaló que el fracaso es parte de la vida y que el carácter es aquello que te saca adelante, confesó que desde muy joven sabía que quería participar y tener voz para incidir en la agenda pública involucrándose de este modo con lo que pasa en el país.

En entrevista, explicó que la única manera de transformar el país es cambiando la mente, la cultura y nuestro modo de ser, factores que únicamente se logran a través de la educación, aunque reconoció que no es sencillo cuando se viene de un entorno complicado o de una situación socioeconómica compleja.

“En muchas ocasiones los jóvenes no tienen la posibilidad de imaginarse algo distinto, entonces tenemos que darles las herramientas para que se visualicen y sepan que con su esfuerzo, preparación y talento todo será diferente. Hablar de lograr un cambio es buscar forjar el carácter; porque origen no es destino, pero carácter sí lo es”, añadió.

También consideró que es muy importante que la educación tenga un alto contenido de habilidades blandas, ya que en realidad se está formando al individuo y su carácter, además agregó que es necesario insertar lo más pronto posible a los estudiantes a la vida laboral.

“Nos dice que hay que saber escuchar nuestro interior y tener confianza en lo que ya sabemos, pero todo esto se da cuando eres una persona abierta, humilde, que puede ver a las demás personas y escuchar sus puntos de vista”, aseveró.

Sobre las decisiones, Ninfa Salinas dijo que se deben tomar cuando se está bien informado y siempre hay que moderar el riesgo, aunque en ocasiones hay que arriesgarse con todo. Sin embargo, llamó a pararse en los “hombros de gigantes” en donde uno sea el que menos sabe, lo que nos permitirá ver más lejos y abrir nuestro abanico de opciones.

Finalmente, reparó en la importancia de ser un gran comunicador. “Si la gente no puede vender una idea, sea cual sea su profesión, si no puede verbalizar algo y detectar si su oyente está entendiendo lo que explica, se vuelve difícil hacer cualquier cosa. Los grandes comunicadores son los que inspiran y motivan al cambio”, dijo determinante.
 
*Colaboración de Patricia Allende Cos, coordinadora de Vinculación con Egresados.