IMPULSA, liderazgo en compromiso social

Conoce nuestro Programa de Liderazgo en Compromiso Social IMPULSA, un espacio en el que redefinimos la visión y estrategia que debe tener un líder social.

Hablar de liderazgo en compromiso social no es tarea fácil, de hecho, es algo realmente complicado, y esto se debe a que normalmente es difícil dar una definición de “liderazgo” con la que todos estemos conformes y porque el universo del “compromiso social” es realmente grande.

El compromiso social se puede traducir a la acción por el clima o al activismo en defensa de minorías, el interés por la infancia temprana o el amor a la vejez. El compromiso social es un abanico de posibilidades tan extenso como problemáticas podamos descubrir, y es por esto que nos atrevemos a decir que el liderazgo en compromiso social es un tema que da para muchas reflexiones, opiniones, tesis y hasta errores.

Ahora intentemos hablar de un líder en compromiso social, pensemos cómo tendría que ser esa persona para poder atender a las necesidades de la sociedad mientras ejerce un papel de liderazgo definido. Lo primero que debemos tomar en cuenta es que el mismo líder no puede atender todas las problemáticas de la sociedad, es decir, no podemos esperar que una persona que tiene cierta afinidad a temas ecológicos sea también líder en escenarios de salud o de hambre. Para poder definir a alguien como líder desde el compromiso social, primero debemos decidir a dónde debemos apuntar y qué necesidad queremos intentar satisfacer.

Una vez que hayamos encontrado nuestro foco de acción, entonces podemos platicar sobre cómo debería ser un líder social. Esta persona debe tener una serie de características particulares (como todo buen líder), sin embargo, me atrevo a decir que hay algunas en específico que son de suma importancia para el desarrollo de su liderazgo.

Características de una persona con liderazgo en compromiso social

Resiliencia y frialdad. Englobamos estas dos características porque las dos tienen como utilidad la protección del líder. Un líder social debe ser una persona capaz de soportar imágenes lamentables, situaciones tristes y, en algunos casos, hasta peligrosas, y de la misma forma tiene que poder mantener la calma y no dejarse llevar por el corazón para actuar de la mejor manera. Recordemos que este tipo de labor tiende a ser excesivamente sentimental, lo cual podría hacernos fallar en momentos clave.

Sensibilidad y humildad. Mencionamos en el párrafo anterior dos características de cara a la protección de la persona que ejerce el liderazgo, ahora, hablando de características de utilidad social, estas dos tienen que ser mencionadas por factores realmente importantes; un líder social tiene que ser capaz de identificar la problemática real y el fondo de una situación en particular, es por ello que la sensibilidad hacia las necesidades sociales es tan relevante y a su vez requiere una gran dosis de humildad, ya que si bien puede desarrollar un “ojo clínico” para las necesidades, no puede caer en la soberbia de dar por hecho que tiene razón, la importancia del contacto con la vulnerabilidad es el único aval que tiene su opinión.

Y este contacto debe ser profundo, real y basado en el respeto constante y recíproco, ya sea a la situación, al afectado o al entorno. De la misma manera, continuando con la humildad, el líder está obligado a entender que el compromiso social es invariablemente una labor de equipo, en donde la competencia no tiene cabida; por el contrario, la importancia de crear alianzas y sumar esfuerzos es posiblemente la clave para el éxito. No se puede entender la labor social como un potenciador de ego, las necesidades son tan extensas que es prácticamente obligatorio comprender que se requiere del esfuerzo de muchísimas personas para lograr comenzar un cambio.

Visión y estrategia. Por último, debemos mencionar estas dos que debe tener un líder social. Durante mucho tiempo se habló de que el trabajo social era meramente voluntariado y altruismo estéril y no remunerado, hoy en día eso es algo que se debe modificar, tenemos que evitar el pensar: “Que bonita labor” y comenzar a actuar de manera profesional de cara al compromiso social. Es utópico pensar que, en la acción social, alguien puede ser voluntario todo el tiempo, es un error pensar que las organizaciones pueden sobrevivir de voluntarios.

Es necesario llevar el trabajo social a otro nivel, a una perspectiva empresarial con inspiraciones sociales. Se requiere de una visión fresca que rompa los paradigmas y entienda que la sensibilidad social y el trabajo por las situaciones vulnerables no están peleados con la remuneración. Claro para esto se necesita un proceso de formación realmente profundo, ya que es sencillo pensar en una empresa social, lo difícil es lograr mantener ese balance.

Escucha, mira y siente la realidad en la que vivimos. ¿Cómo la percibes? ¿Qué es lo que ves? ¿Qué es lo que escuchas? ¿Qué es lo que sientes?

Nuestro Programa de Liderazgo en Compromiso Social IMPULSA busca que los alumnos desarrollen las habilidades necesarias que les permitan influir sobre la realidad de México y el mundo mediante el diseño, la ampliación y la administración de empresas y proyectos sociales sustentables, teniendo como resultado verdaderos líderes y emprendedores sociales.

Este programa se integra por alumnos con diversos intereses, pero con una meta en común de crecer y formarse para generar ideas y proyectos que transformen sus vidas y nuestro país.