¿Cómo dar malas noticias?
Un artículo del Centro Psicopedagógico Anáhuac que emite una serie de recomendaciones que facilitan la tarea de comunicar malas noticias.
El Centro Psicopedagógico Anáhuac, a través de su Clínica Anáhuac Cenyeliztli, comparte un artículo de la maestra Rosa María Rodríguez sobre la forma de transmitir malas noticias o un mensaje delicado y cómo este puede potenciar los efectos del mismo.
¿Cómo dar malas noticias?
A veces nos encontramos en situaciones en donde tenemos que dar una mala noticia, entendiendo como mala noticia todo aquello que impacte de manera negativa y drástica la vida de otra persona y, por tanto, conlleva un golpe emocional importante.
Solo pensar en tener que dar una mala noticia nos altera, porque tendemos a empatizar con el otro y con las reacciones que suponemos tendrá ante lo que vamos a comunicar. Es por ello que es recomendable tomar ciertas acciones que faciliten en la medida de lo posible la tarea de comunicar algo como un accidente o enfermedad de una persona cercana, el fallecimiento de alguien, un despido laboral o la ruptura de una relación amorosa.
Toda persona merece un trato digno, por lo tanto, evitemos comunicar las malas noticias a través de un mensaje o un correo. A veces no hay otro remedio que hacerlo a través de una llamada telefónica, pero al menos aquí podemos modular las palabras y el tono a diferencia de un texto.
¿Malas noticias?
¿Sabías que… la forma de transmitir el mensaje puede potenciar los efectos del mismo?
Si desafortunadamente nos ha tocado ser los portadores de una mala noticia debemos considerar, mientras más grave y de mayor impacto emocional sea, buscar la mayor cercanía física y emocional.
Lo primero es respondernos a la pregunta de si somos la persona adecuada para dar la noticia o si tendríamos que buscar a algún familiar, amigo o al médico tratante.
Si la respuesta es que nosotros somos a quien le toca dar la noticia, estas son algunas consideraciones que nos ayudarán a transmitir el mensaje:
• Buscar el momento más adecuado, que incluya un tiempo y sin prisas, para que la persona pueda procesar y reaccionar ante lo que va a escuchar.
• Escoger un lugar tranquilo y privado, de preferencia donde puedan estar sentados, pues no sabemos cómo va a reaccionar la persona que tiene derecho a hacerlo como en ese momento le salga.
• Ir al punto, con claridad y sin rodeos, pero con la voz pausad. Si se puede, hay que hacerlo mirando de frente y a los ojos
• Con serenidad y empatía, cercanos, por si se presta a un contacto físico que brinde apoyo, como tomar de la mano o tocar el hombro.
En caso de los médicos que tienen que dar malas noticias a sus pacientes, es importante que lo hagan de manera individualizada, equilibrando veracidad y delicadeza; mostrando el conocimiento que le permita dar la información que tanto el paciente como la familia requieren y evitando tecnicismos que dificulten la comprensión. La relación de confianza entre médico – paciente siempre influirá positivamente al tener que informar malas noticias.
Las noticias graves nunca son bienvenidas, ¡pero la forma en la que se comunican puede suavizar el impacto emocional!
*La maestra Rosa María Rodríguez Rodríguez es licenciada en Psicología y maestra en Terapia Familiar. Se desempeña como coordinadora del Centro de Apoyo Familiar “Somos tu familia” y de la Clínica de Psicología Anáhuac – Cenyeliztli. También funge como docente y psicoterapeuta.
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El Centro Psicopedagógico Anáhuac, integrado por la Clínica Anáhuac Cenyeliztli, la Coordinación de Orientación Vocacional Anáhuac y el Programa de Apoyo al Estudiante (PAE) de nuestra Universidad, tiene como misión atender y mejorar la salud mental de alumnos, profesores, personal administrativo, egresados y público en general. Trabaja en favor de la salud y del bienestar de las personas y familias mexicanas en proyectos formativos, de intervención y de servicio a la sociedad.
Más información:
Centro Psicopedagógico Anáhuac
Mtro. José María López Landiribar
jmlopez@anahuac.mx