"Antes no tenía idea de lo que era emprender": Juan Inclán, alumno de la Incubadora de Negocios

Nuestro alumno de Ciencias Actuariales compartió con la Comunidad Universitaria su experiencia dentro de la Incubadora de Negocios.

Juan Carlos Inclán Soto (9º semestre de Actuaría) comparte con la Comunidad Universitaria su paso por la Incubadora de Negocios de la Facultad de Economía y Negocios.

Motivado por la curiosidad por emprender fue como decidió acercarse a esta. “Un día manejando de camino a mi casa se me ocurrió la idea que hoy estoy desarrollando.

Siendo honesto, antes de entrar a la Incubadora de Negocios no tenía idea de lo que era emprender. Tenía un poco de idea por la clase que llevamos en la Anáhuac, pero estar en la Incubadora es una experiencia que va más allá del aula de clase, que hace salir de tu zona de confort y aprender cosas que puede que no tengan nada que ver con la carrera que estudiaste”.

En entrevista, Juan Carlos confesó que a veces suelen verse lejos las posibilidades de que un proyecto se vuelva realidad, sin embargo, consideró que es necesario ser resiliente y paciente, “vivimos en un mundo tan acelerado y competido que si no vemos resultados a corto plazo nos podemos desmotivar, cuando Roma no se construyó en un día, y eso mismo aplica para el proyecto. En la Incubadora verás que hay personas que avanzan rápido y otras que van dando pasos un poco más lentos, y es totalmente normal”.

También dijo haberse sentido apoyado por los guías del programa y los mismos emprendedores, “ellos al final juegan un papel importante en tu emprendimiento, desde recibiendo críticas constructivas de tu proyecto hasta ser ese empujón extra que te lleva a ir más allá, seguir con tu proyecto y salir cada día más motivado”.

A pesar de estar viviendo una crisis mundial a causa del COVID-19, la Incubadora de Negocios supo adaptarse a la situación actual y apoyar a los emprendedores para que su proyecto siga avanzando.

“Mi proyecto constó de una aplicación móvil para la asignación de lugares de estacionamiento. A lo largo de la Incubadora, gracias a las metodologías que nos enseñan (design thinking), pude validar y encontrar una necesidad que estaba resolviendo mi producto”, explicó Juan Carlos, aunque confesó que debido a la pandemia no sería del todo viable su propuesta hasta una vez controlada la situación.

Ante este panorama, decidió ‘pivotear’ su proyecto a un sistema de aforo en vivo de los lugares comerciales, pero encontró que los mismos negocios realizaron esta maniobra en sus propias aplicaciones. “Gracias al programa de incubación me pude dar cuenta de ello y en su momento retomaré mi idea original de negocio y muy posiblemente tenga idea de uno nuevo”.

De acuerdo con nuestro alumno, la Incubadora le dio las herramientas para emprender y para que “esa sensación de estar perdido o no tener idea de cómo hacerlo desaparezca”.

La Universidad Anáhuac México cuenta con un programa de emprendimiento “Emprende Anáhuac México”, que tiene como misión generar una cultura y mentalidad emprendedora dentro comunidad Anáhuac.

Además, suma un Programa de Incubación que se conforma de dos etapas: pre-incubación (validación de idea) e incubación (creación de negocio), en el que estudiantes y egresados forman una comunidad de emprendedores que eventualmente se torna en lo más valioso de la metodología al generar un grupo de amigos, potenciales socios y gente que se brinda retroalimentación, consejo, contactos, y apertura de oportunidades. Para obtener mayor información, ingresa al siguiente enlace: Emprende Anáhuac México