La hermana Daniela Cannavina habló de la percepción que se tiene de la mujer en Latinoamérica y el Caribe, así como de su vocación humanizadora, integral y humanizante.
El pasado 29 de marzo, el grupo interdisciplinario de investigación y estudio Querida Amazonía llevó a cabo la sesión especial en conmemoración del mes de la mujer con la plática “La mujer y su contribución en la Iglesia Católica”, impartido de manera virtual por la hermana Daniela Cannavina, religiosa perteneciente a las Hermanas Capuchinas de Madre Rubatto de la orden Franciscana, profesora en ciencias religiosas, licenciada en teología por la Universidad Católica de Argentina y secretaria general de la Congregación Latinoamericana y del Caribe de religiosos (CLAR).
Durante la sesión, conducida por el maestro Carlos Lepe Pineda, distinguido miembro del grupo Querida Amazonía y responsable del centro de pensamiento social cristiano en la Universidad Anáhuac México, la hermana Daniela Cannavina estableció la importancia de compartir su propia experiencia como mujer consagrada, comprendiendo que la posición de la mujer dentro de la Iglesia Católica es de gran relevancia y valía.
Afirmó también que existen gestos y actitudes que se asimilan de la vida cotidiana y proceden del ethos femenino que nos introduce en experiencias de servicio, sororidad y responsabilidad, además de gestos de ternura y amor.
Asimismo, mencionó que a la mujer del continente Latinoamericano y del Caribe se le comprende como una mujer resiliente, lo que la lleva a superar ciertas circunstancias, es decir, a recuperarse ante la adversidad para seguir proyectando un futuro.
A partir de estos conceptos se compartió que la vocación de la mujer no se realiza únicamente en torno a una sola función, sino que es una humanizadora, integral y humanizante.
La hermana Cannavina también habló de su experiencia en la Asamblea Eclesial para América latina y el Caribe en la que recalcó el nuevo lugar de la mujer en la iglesia y la sociedad, así como la importancia de escuchar las voces de estas mujeres que tantas veces fueron silenciadas o excluidas y violentadas de diversas formas y en distintas etapas de la vida con la finalidad de resaltar el rol preponderante de la mujer en sociedad, comunidad e iglesia, con el objetivo de erradicar estas actitudes contrarias a la dignidad de la persona humana.
Por otra parte, se abordaron otros conceptos fundamentales sobre la presencia de la mujer en diversos círculos, los distintos factores a los que se enfrentan tanto en sociedad como en el ámbito eclesial y la dificultad que existe dentro de la Iglesia Católica para acceder a un puesto de liderazgo o a una dirección generalmente gobernada por varones con una teología más patriarcal, que no considera al pensamiento de la mujer y no se adapta a esta nueva realidad.
Al concluir, hizo énfasis en algunas reflexiones sobre las luces de esperanza, el empoderamiento de la mujer, su ocupación en puestos de liderazgo y su participación en diversas esferas del entorno social dando fortaleza y estabilidad a su quehacer y su sentir. Sobre este tema, destacó el esfuerzo que hace el Papa Francisco para impulsar este tema y mantenerlo en un futuro.
Al culminar la asamblea se conformaron distintos núcleos de mujeres buscando hacer una iglesia más sinodal alrededor de toda la Amazonía, que busca marcar nuevas etapas sumando al caminar eclesial, comprendiendo a la sinodalidad como la corresponsabilidad de los laicos varones-mujeres en la tarea evangelizadora. La sinodalidad es la invitación a caminar en conjunto como Iglesia que conlleva un tanto de mentalidad como de prácticas para tomar decisiones que generen más inclusión.
Para finalizar, la Hermana Cannavina dejó claro que el caminar de la vida consagrada no se vive desde un ángulo de tensión, sino desde un ángulo comunitario eclesial, siendo así un testimonio de comunión y de unidad.
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Fecha de publicación: 13 de abril de 2023
Más información:
MPSS Elian Vulfovich
Facultad de Bioética
bioética@anahuac.mx
