La diversidad ecológica, la multitud de culturas y los paradisiacos paisajes de México atrajeron en 2018 a más de 41 millones de viajeros, posicionándonos como el 7º país más visitado en el mundo.
El turismo en México es parte esencial de la economía y representa el 8.8 % del Producto Interno Bruto (PIB), ya que genera ingresos por 23,263 millones de dólares y crea 4.1 millones de empleos directos y 6.5 millones indirectos.
Sin embargo, una de las mayores preocupaciones del sector es la saturación de los destinos turísticos y la sobreexplotación de los recursos naturales que ponen en riesgo el patrimonio natural y cultural del país.
En el Reporte de Competitividad en Viajes y Turismo 2017 del Banco Mundial, México ocupa la segunda posición en recursos naturales, pero se ubica en el lugar 116 de 136 en la categoría de sostenibilidad. El reto para los próximos años, según explica Francisco Madrid Flores, director de la Facultad de Turismo de la Universidad Anáhuac Norte, es “hacer sostenible esta masificación”.
Una nueva forma de viajar
¿Podemos conservar el medio ambiente a través del turismo? ¿La sustentabilidad aplicada al turismo puede ayudar al crecimiento económico de las comunidades? La respuesta es sí gracias a la nueva tendencia mundial en turismo sustentable.
La Organización Mundial de Turismo, define el turismo sostenible como aquel que toma en cuenta “las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales que implica satisfacer las necesidades de los visitantes, la industria, el entorno y las comunidades anfitrionas”.
Siguiendo los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, el objetivo del turismo sostenible es lograr un equilibrio entre lo ambiental, lo económico y lo social. De esta manera, se prioriza la conservación de la biodiversidad, el crecimiento de la economía y la generación de empleos justos.
Desde 2011, a través del Programa de Turismo Sustentable de la Secretaría de Turismo, las empresas y los destinos turísticos son evaluados en cuanto a control de energía, agua, residuos y carbono, así como en impacto al desarrollo urbano y social, esto con el fin de incentivar modelos de negocios sustentables.
Algunas de las certificaciones turísticas que el gobierno otorga son el de Calidad Ambiental Turística, Distintivo Turístico Limpio y Distinción S. A nivel internacional, las organizaciones EarthCheck, Rainforest Alliance, Biosphere Turism y Green Key otorgan reconocimientos sustentables.
Algunos de los sitios turísticos en el país que han logrado destacar por sus prácticas ecológicas son Huatulco, Ixtapa, Loreto y Bahía de Banderas. Además, en 2017 la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad creó corredores biológicos en la Sierra Madre Oriental, la Selva Lacandona y en la costa norte de Yucatán.
A pesar de estos avances, el turismo en México sigue sin ser 100 % sustentable. La única manera en la que la sustentabilidad tenga éxito es si todos los sectores de la sociedad, gobierno, empresas y ciudadanos, se comprometen al cuidado del planeta.
Si quieres formar parte de la solución, en México existen varias opciones de carreras profesionales dedicadas a la promoción turística del país enfocadas al desarrollo sustentable y conservación del patrimonio nacional.