En el Congreso Internacional de las Familias (CIFAM) se presentó un programa exclusivo para jóvenes en el que participaron influencers y académicos para abordar inquietudes de la juventud como la fe, el amor, el sentido de vida, la sexualidad y el dolor, encuentros que no solo fueron formativos, sino que crearon puentes de conexión, empatía y diálogo.
El primer día se presentó un panel llamado “Muchas dudas, una verdad” conducido por “Aladetres”, un podcast de un par de amigos españoles que han ganado popularidad en redes sociales con sus entrevistas. La conversación siguió una secuencia de temas en la que participaron tres expertos. El Dr. Alejandro Landero abrió el diálogo invitando a los asistentes a ser como árboles: “bien arraigados en valores y llamados a dar fruto”, frente a todos los retos individuales, familiares y sociales que enfrentan los jóvenes. Sobre todo, recordó que la identidad como hijos de Dios apunta a vivir en clave de sobreabundancia y no en la desesperanza, y reiteró que toda persona posee una dignidad inalienable y, por lo tanto, la vida es un don, misterio y tarea.
Posteriormente, el Dr. Carlos Beltramo habló sobre qué es el amor, superando el pensamiento común de que solo se trata de un sentimiento. Comenzó con una definición que partía del pensamiento de Josef Pieper para decir que “es gritarle al otro desde lo más profundo: ¡Qué bueno que existas!, vale la pena estar contigo. Es no tener miedo de compartir el propio mundo”. Con tal de que podamos saciar este anhelo de un amor de verdad en la Tierra, dejó una gran lección al señalar que “el corazón se recupera amando y siendo amados”.
Después de esta intervención, la Psi. Isabel Rojas recordó que la familia es la base más perfecta en donde aprendemos a amar y ser amados, debido a la complementariedad (biológica y genética) entre el hombre y la mujer. Sin embargo, advirtió que existen tres grandes males en nuestra época: el relativismo, individualismo y pesimismo, a los que se debe hacer frente con verdad, complementariedad y esperanza. Concretamente, señaló que hay que mostrar que la alianza varón y mujer es lo que ha mantenido a la humanidad y, por ende, hay que ser testimonios sanos de nuestra feminidad y masculinidad, puesto que “una herida mal curada o no sanada nos hace ver, sentir y relacionarnos de una manera muy distinta a lo que somos”.
Por último, la Dra. Rosario Laris consideró que hoy más que nunca se atenta contra el valor de la vida y la belleza de la sexualidad. También insistió que “cada vida vale y por eso vale la pena defenderla”, y recordó que la sexualidad humana integra todas las dimensiones y que su vivencia total debe comenzar con un compromiso que se da gracias a la exclusividad. Por eso, invitó a los asistentes a vivir el noviazgo como el mejor momento para consolidar la amistad e intimidad emocional.
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Facultad de Educación y Humanidades
Mtra. Claudia Elizabeth Orozco Galindo
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