
La Dra. Amira Rebeca Litmanowicz Frank, docente de nuestra Facultad de Educación y Humanidades, participó con dos artículos en el Simposio de Filosofía de la Educación del IV Congreso de Educación de la Universidad Panamericana de Aguascalientes celebrado el mes de diciembre de 2024.
“Educare y Educere: implicaciones éticas y antropológicas de la pedagogía de María Montessori” aborda la profunda riqueza conceptual de la educación según María Montessori. En este artículo, la autora examina el doble sentido etimológico de “educare” (dirigir desde fuera) y “educere” (extraer desde dentro), articulando una visión integral de la educación como proceso ético y antropológico.
A través de un diálogo entre la tradición filosófica griega y el pensamiento montessoriano, se resalta la educación como medio para la construcción del carácter y la realización del potencial humano. Inspirada por Aristóteles y Rousseau, Montessori conceptualiza al niño como un “embrión espiritual” cuya naturaleza lo impulsa hacia el desarrollo de su personalidad en libertad. En este proceso, los obstáculos naturales fortalecen la voluntad y moldean su carácter, destacando el acto educativo no como una imposición, sino como un acompañamiento respetuoso del desarrollo espontáneo.
El texto enfatiza que Montessori veía al niño no solo como receptor pasivo de conocimientos, sino como el agente que construye al hombre y, por ende, transforma la humanidad. También plantea que la educación, en sus facetas de “educare” y “educere”, debe promover una armonía entre el crecimiento físico, psíquico y espiritual, contribuyendo así a la paz y el progreso social.
Este artículo también invita a los educadores a reflexionar sobre su papel en la formación humana, recordando que el respeto, el amor y la fe en el potencial del niño son fundamentales para la renovación de la humanidad y la construcción de una sociedad armónica.
El segundo texto titulado “La Paideia griega como ideal de formación en la pedagogía Montessori” explora cómo la Paideia griega influye profundamente en los fundamentos éticos y pedagógicos de María Montessori. Concebida por los antiguos griegos como un modelo integral de formación humana, enfatiza el desarrollo de la virtud y el carácter como pilares de la educación.
La autora traza un paralelismo entre los ideales de Sócrates, Platón y Aristóteles con el enfoque montessoriano. Sócrates, con su mayéutica, inspira la búsqueda del conocimiento; Platón promueve la trascendencia hacia el verdadero ser, y Aristóteles destaca la virtud y el hábito como camino hacia la felicidad. Montessori adopta y transforma estas ideas, centrándose en la infancia como la etapa clave para construir una “segunda naturaleza” que armonice razón, libertad y virtud.
El artículo resalta cómo Montessori redefine la educación no como mera transmisión de saberes, sino como un proceso para liberar el potencial innato del niño. Este enfoque respeta la unidad cuerpo-alma y enfatiza un ambiente preparado donde el niño pueda desarrollarse libremente y alcanzar una vida virtuosa y plena. En última instancia, la autora subraya que, tanto para los griegos como para Montessori, la educación es el medio más eficaz para transformar al individuo y reconstruir la humanidad.
Se trata de una lectura imprescindible para quienes buscan comprender las raíces filosóficas de la pedagogía Montessori y su relevancia en el contexto educativo contemporáneo.
Ambos escritos aportan a la educación y las humanidades al destacar al niño como el centro del desarrollo humano y agente transformador, y se enfatiza una pedagogía que respeta su potencial innato, promoviendo una formación que trasciende la transmisión de saberes hacia la construcción de una humanidad renovada.
Más información:
Facultad de Educación y Humanidades
Mtra. Susana Memun Zaga
susana.memunzag@anahuac.mx