Alejandro Pérez Boyer, Maestría en Economía y Negocios 2009. Hook-up Lead Engineer en Saipem Qatar Branch.
"No mires cuánto te queda por recorrer, sino hasta dónde has llegado."
Egresado Anáhuac Veracruz de la Maestría en Economía y Negocios, fungiendo como Hook-up Lead Engineer para el proyecto de expansión de instalaciones marítimas y terrestres para asegurar la sustentabilidad de la producción de gas natural del campo norte (NFPS) de Qatargas.
¿Cómo fue su experiencia en la Universidad Anáhuac Veracruz campus Xalapa?
Fue una experiencia de mucho crecimiento, tanto en lo académico como en lo personal, ya que escogí la maestría de Economía y Negocios para poder ampliar mi visión con respecto a ciertas áreas que no formaron parte de mis estudios de ingeniería, pero que son de gran relevancia para la industria, como son las finanzas, el análisis de los mercados y la planeación estratégica.
Viví un ambiente de colaboración y amistad, tanto por parte de los profesores como por mis compañeros, que a través de sus experiencias y conocimientos me aportaron valiosas enseñanzas, las cuales he podido aplicar en mi trabajo en diferentes situaciones que se me han presentado.
Teniendo un perfil de ingeniero mecatrónico, ¿cómo fue su elección por la Maestría en Economía y Negocios?
Como ingeniero, empecé a trabajar en un área de instrumentación en la que no sólo veía el diseño y ejecución de los trabajos, sino también el desarrollo comercial. Poco a poco empecé a involucrarme en el desarrollo de negocios, y posteriormente en otra empresa que se dedicaba a la fabricación de turbinas de gas con diferentes aplicaciones para el mercado energético; fue así, como siguió creciendo en mí la inquietud por el área de negocios y finanzas.
Estas eran herramientas con las que yo no contaba en mi carrera de ingeniería, pero que fui aprendiendo sobre la marcha. En mis estudios de Ingeniería Mecatrónica vi un poco de electrónica y un poco de mecánica, pero nada administrativo, por lo que tenía inquietud de aprenderlo con un trasfondo académico.
¿Qué considera que le aportó estudiar la Maestría en Economía y Negocios y cómo lo aplica en el ámbito profesional?
La planeación estratégica. Muchas de las situaciones que surgen en el trabajo son por falta de planeación, entonces al tener las herramientas que nos proporcionaron, en las que tratas de innovar en formas o escenarios y pensar cómo resolver si se complican, es un aprendizaje en el que la Maestría me ayudó mucho.
En el aula no sólo se veía lo teórico, mucho de lo aprendido se basaba en experiencias y vivencias de los compañeros y maestros sobre situaciones que se les presentaron y cómo las abordaron; esto te va orientando sobre cómo dar soluciones.
¿Cuál fue su mejor experiencia cursando su Maestría en Economía y Negocios?
Recuerdo mucho un viaje que hicimos a la Ciudad de México a un curso de negociación que ofrecía la Maestría en Economía y Negocios. Fue un tema muy interesante y me gustó mucho cómo se abordó ese tema, pues destacaron que la negociación no sólo se ocupa a nivel empresarial, sino que también se aplica en temas personales como con la familia, las amistades y con todas nuestras relaciones. La negociación va desde cómo abordamos los problemas, cómo tratamos de resolverlos y el resultado que vamos a obtener. Fue muy interesante y además fue muy grato convivir con mis compañeros y mis maestros.
¿Cómo ha sido su experiencia profesional?
Inicié haciendo mis prácticas profesionales en Alemania durante mis estudios de Ingeniería Mecatrónica, siendo este mi primer contacto con la industria en el extranjero.
Al término de mis estudios, incursioné en el sector energético a través de una comercializadora de equipos de control y medición para sistemas de gas, pasando posteriormente al área de desarrollo de negocios de uno de los fabricantes de turbinas para diferentes aplicaciones de gas natural. En esta etapa, se despertó mi interés sobre los proyectos de construcción de instalaciones ya que, como parte de mis responsabilidades, tenía que visitar plataformas marítimas.
Posteriormente, surgió la oportunidad para trabajar en un proyecto de construcción de una plataforma de compresión de gas que fue realizado en un astillero en Yantai, China, seguido por la etapa de instalación y puesta en marcha en aguas territoriales mexicanas. Durante esta etapa, me encontré rodeado de profesionistas y especialistas de diferentes nacionalidades, donde me percaté de las habilidades y el nivel de preparación de cada uno de ellos. Con ello, entendí que las diferencias culturales, más que generar una barrera laboral, si se abordaba un problema con un punto de vista heterogéneo y abierto, se podía comprender la complejidad de la situación y encontrar nuevas soluciones.
Después de seguir participando en diferentes proyectos de desarrollo de infraestructura energética en México, se presentó finalmente una oferta laboral para venir a trabajar a Qatar en una empresa transnacional, en la cual me he enfrentado a nuevos retos que implican sistemas de gestión mucho más complejos y con más áreas involucradas activamente en la toma de decisiones, procesos de ejecución innovadores y altos estándares de calidad, así como condiciones climáticas adversas que limitan el desempeño de los equipos de trabajo.
¿Qué hace la empresa en la que te estas desempeñando actualmente y cuáles son tus funciones?
SAIPEM es una constructora de una empresa paraestatal de Italia que se llama ENI, pero la principal fortaleza de esta empresa es la construcción de ductos marinos y de instalaciones marítimas, así como de plataformas petroleras y algunas instalaciones terrestres para el manejo de gas y petróleo.
Aquí en Qatar, ellos están desarrollando una primera etapa en la que estoy participando actualmente, enfocada en la ampliación de unas plataformas marítimas y también instalaciones terrestres que permitirán recibir más gas y asegurar la producción de gas de Qatargas, que es la empresa estatal para el manejo de esta materia.
Yo estoy en el área de ingeniería de la construcción y soy el ingeniero líder de interconexión, por lo que somos la interfaz entre ingeniería y el equipo que cubre los trabajos en campo. Nosotros aterrizamos las ideas de ingeniería para darle más realidad a todos los recursos que se van a emplear para que el cliente apruebe la propuesta de la constructora y que podamos empezar a entrar a diferentes áreas.
¿Cómo surgió la oportunidad de irse a Qatar y cuál fue el reto más grande al que se enfrentó?
La oportunidad surgió a través de un compañero de trabajo. Anteriormente, yo trabajé con él en una empresa de Veracruz, y aunque el camino siempre nos fue mandando por diferentes proyectos, siempre existió una buena relación.
Cuando trabajas bien con una persona, empiezan a surgir las recomendaciones, y es así como las redes profesionales van acercando a ti nuevas oportunidades. Apliqué, obtuve el puesto y en junio cumpliré un año viviendo aquí.
Me costó alrededor de cuatro meses realizar todo el papeleo necesario para traer a mi familia y ha sido un cambio muy grande residir aquí, pues extrañamos mucho la comida de México y a nuestras familias, por la diferencia de horario de 9 horas. Qatar es un lugar muy seguro, interesante y multicultural, pues aproximadamente el 80% de la población es foránea, siendo sólo el 5% cataríes.
Uno de los principales desafíos a los cuales nos enfrentamos al mudarnos a Qatar fue el choque cultural. En un principio, me causaba mucho asombro, sobre todo por las ideas, la predisposición y los miedos de todo lo que se cuenta sobre estos países con una identidad tan diferente, sin embargo, al vivirlo cambia, y finalmente entiendes que es parte de su cultura, aunque es muy diferente a lo que conocemos. Particularmente, Qatar no es tan cerrado y vivimos muy tranquilos y seguros.