Comienza construcción de las primeras dos casas en Guerrero tras huracán Otis

A través de la campaña “Vamos por Guerrero”, que movilizó a nuestra Comunidad Anáhuac y a numerosos donantes, se logró beneficiar en esta primera etapa a dos familias.

Nuestra Universidad Anáhuac México lidera la campaña de reconstrucción en Guerrero tras el paso del huracán Otis. El grupo de voluntarios comenzó con la construcción de dos casas en Puerto Marqués para las familias afectadas.

En octubre de 2023, el huracán Otis golpeó con fuerza la región de Acapulco, Guerrero, causando estragos en la infraestructura, lo que dejó a muchas familias en situación de vulnerabilidad. Ante esta emergencia, la Comunidad Universitaria respondió de inmediato con la colaboración de administrativos, docentes, alumnos, familiares y voluntarios externos, estableciendo un centro de acopio que logró reunir más de 80 toneladas de donativos, recursos que fueron distribuidos en las zonas más afectadas, proporcionando alivio inmediato a las comunidades damnificadas.

En el marco del 50 aniversario de la Dirección de Compromiso Social, Acción Social de la Universidad Anáhuac (ASUA) decidió ir más allá de la ayuda inmediata y se propuso una meta ambiciosa: construir cinco casas para las familias más afectadas por el huracán. Así nació la campaña “Vamos por Guerrero”, que movilizó a nuestra comunidad y a numerosos donantes, entre ellos la Fundación Pepe, para recaudar los fondos necesarios.

Gracias al esfuerzo de muchas voluntades y al trabajo conjunto con la Asociación Civil Construyendo Comunidades Integrales, A.C., el sueño comenzó a hacerse realidad. Del 28 al 31 de mayo de 2024, un grupo de 40 alumnos voluntarios de la Anáhuac se trasladó a Puerto Marqués. Durante esos días, los voluntarios realizaron un arduo trabajo poniendo en acción mente, manos y corazón para construir las dos primeras casas destinadas a familias afectadas.

Esta actividad no solo brindó un hogar seguro a las familias beneficiadas, sino que también representó un espacio de compañerismo y vocación al servicio de México, fomentando una genuina conciencia social entre los voluntarios asistentes. La campaña “Vamos por Guerrero” sigue en pie, con el corazón de la Anáhuac enfocado en seguir apoyando con voluntariado de construcción en Acapulco.

La causa no termina aquí. Necesitamos más manos dispuestas a construir un futuro mejor para las familias afectadas. Cada esfuerzo cuenta y cada donación hace la diferencia. ¡Vamos por Guerrero!