Académicos de Bioética participan en Parlamento Abierto para discutir la Objeción de Conciencia
En esta ocasión las doctoras Martha Tarasco y Rosario Laris, así como los doctores Agustín Herrera, José Manuel Madrazo y Antonio Moreno se sumaron a la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados para debatir dicho tema.
El pasado 2 de febrero, la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados convocó un Parlamento Abierto (semipresencial) en el que se analizaron las diferentes posturas en materia de Objeción de Conciencia con la finalidad de atender el vacío legal que existe en el artículo 10 Bis de la Ley General de Salud.
Académicos y expertos en el tema participaron compartiendo sus puntos de vista, entre ellos académicos de la Facultad de Bioética de nuestra Universidad Anáhuac México, como las doctoras Martha Tarasco y Rosario Laris, así como los doctores Agustín Herrera, José Manuel Madrazo y Antonio Moreno.
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En el evento se analizó el concepto de Objeción de Conciencia y la incapacidad de invocarla cuando se ponga en riesgo la vida del paciente o se trate de una emergencia médica.
Durante su participación, la doctora Martha Tarasco se enfocó en insistir en la necesidad de la práctica de la Objeción de Conciencia y se refirió a ella como un “ejercicio de la salud y madurez democrática que proviene de la razón y no de la fe”. Destacó también que todos los profesionales de la salud son un fin en sí mismos, más no instrumentos o medios para unos fines, aunque al volverse autómatas de leyes o mandatos, se daña su dignidad humana, el centro y fundamento de los derechos humanos.
Posteriormente, mencionó que este derecho es el que permite el desempeño de la labor de la medicina bajo principios éticos, bioéticos y deontológicos en estado armónico con la medicina basada en evidencia para así cumplir la lex artis ad hoc.
A modo de conclusión, recordó a todos que en estos tiempos de pandemia los profesionales de salud no se negaron a dar atención a los pacientes con COVID-19 e pidió a los diputados que al momento de legislar no lo hagan de manera complicada, es decir, de modo que no se pueda ejercer la legislación.
En la ponencia de la doctora Rosario Laris se recordó que el valor de la Objeción de Conciencia se basa en tres aspectos: el respeto a la vida, libertad de prescripción médica y la independencia individual de cada médico y precisó que “el médico no es un técnico asalariado cuyos valores morales han de someterse al dinamismo legal”.
Asimismo, consideró la Objeción de Conciencia como un “tesoro social” y que se debe mejorar el sistema de salud en el que los pacientes puedan ser atendidos por médicos libres, con conciencia y que sepan guardar su independencia en la práctica médica.
Al finalizar las presentaciones, los diputados establecieron los alcances y límites para la legislación de la Objeción de Conciencia en materia sanitaria en donde es importante construir un dictamen para las iniciativas presentadas para reformar la Ley en materia.
Más información:
Facultad de Bioética
MPSS Marcela Garibay
bioética@anahuac.mx