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Estas son las grandes oportunidades que ofrece la responsabilidad social

Estas son las grandes oportunidades que ofrece la responsabilidad social

La industria turística año con año se enfrenta a nuevos retos y al llegar un nuevo ciclo, los países buscan de una manera u otra atraer a un mayor número de visitantes, tanto nacionales como internacionales.
 
Ello permite un mayor crecimiento en todos los sentidos en el destino seleccionado, pero también implica una gran responsabilidad para poder afrontar las situaciones emergentes que pueden surgir en el mismo destino.
 
Los destinos turísticos reciben con mucho gusto a los visitantes, pues de ellos viven y gracias a su presencia hay vida y movimiento en el destino, si no sería un pueblo fantasma que tarde o temprano desaparecerá del mapa. Necesitamos gente para seguir creciendo, pero como todo en la vida, cuidado, no debemos de crecer desmedidamente.
 
Existen una serie de aspectos que se deben de analizar y cuidar en un destino turístico, considerando la demanda que puede llegar en los próximos meses o años y tomando en consideración lo que ya sucede en otras ciudades del mundo. Los mensajes que se nos envían en otros destinos debe alertar a los que están en crecimiento o aquellos que pretenden serlo. Situaciones de sobrepoblación y conflictos con los visitantes se van a ver cada día más. ¿Se tendrán todos los recursos para combatir estas situaciones?
 
Es muy bonito ver una serie de visitantes nacionales o extranjeros en los diferentes destinos turísticos. Una mezcla de culturas que permite al destino posicionarse en la mente de los consumidores y estar a la vista de todos. Dar a conocer las bellezas naturales, culturales y gastronómicas que se tienen, permiten mostrar lo grande que podemos llegar a ser. Destinos poco conocidos que le hacen competencia a los destinos tradicionales y que muchos turistas ya conocen. Pero todo ello implica una gran responsabilidad social que las empresas, los gobiernos y el mismo viajero deben de considerar y asumir. La naturaleza – ambiente en sí se está viendo afectada por tanto viajero.
 
Aspectos a considerar


Dentro de los principales aspectos que se deben analizar antes de considerar un destino como nuevo producto y/o sobrevender ese destino, es si éste cuenta con la infraestructura adecuada para soportar tal demanda. Constantemente se escucha que en diferentes destinos se empiezan nuevos proyectos turísticos por lo general, construyendo hoteles, restaurantes, bahías, así como centros comerciales y recreacionales entre muchos otros. Para todo ello se debe hacer obras que de una forma u otra va a afectar al medio ambiente.
 

Al final del día todo ello puede estar bien, si el destino soporta la infraestructura y si ésta realmente se requiere, pero se ha considerado que ello implica la generación de un nuevo consumo de generación de agua, electricidad, consumo de alimentos que a su vez se traduce en generación de basura inorgánica y orgánica. Todo ello implica de una manera u otra una contaminación ambiental. Es muy cierto que también es una fuente de empleo, que le permitirá a muchas personas a generar un ingreso, pero al final del período estas personas se volverán a quedar sin nada. Analicemos los cinturones que existen alrededor de los diferentes destinos turísticos.

No todo son ventas


Para las empresas turísticas es fundamental el entender que no todo deben ser las ventas como tal, sino vender un producto – servicio completo. Es muy cierto que a las empresas les interesa vender y vender prácticamente lo que sea, con tal de generar un ingreso. ¿Pero han considerado alguna vez integrar un producto – servicio completo? Con completo me refiero a un producto totalmente integrado en dónde también se cuide lo más posible el ambiente que rodea a la empresa. La empresa tiene la ventaja de poder escoger la localidad en dónde se va a establecer, pero al mismo tiempo tiene la obligación y el compromiso moral de cuidar todo aquello que lo rodea. ¿Cuántas comunidades locales se ven realmente beneficiadas con la construcción de un nuevo complejo turístico? ¿A cuántas de estas comunidades se les apoya con trabajo?
 
Algunas de las empresas turísticas se han dado a la tarea de un tiempo atrás de emplear ciertas acciones que busquen de una forma u otra el cuidar el medio ambiente. Acciones que involucren tanto a los colaboradores como a los huéspedes. Buscan crear conciencia en cada uno de ellos buscando generar un ahorro. Pero en realidad, ¿esto es suficiente? ¿Se han pensado en qué otras acciones se pueden ejercer para poder lograr un verdadero impacto? Habría que asesorarse con personas especializadas en los temas ambientales, especialistas en campañas de responsabilidad social que puedan apoyar a la empresa a generar un verdadero impacto.
 
Posiblemente vaya yo a ir en contra de ciertos proyectos, pero creo que algunos destinos ya están saturados con establecimientos y no requieren de nuevos. Su capacidad operativa, y me refiero a todos aquellos complementos que se requieren para su operación, ya no son suficientes. Empiezan a escasear y es un peligro muy fuerte para la zona. Es lamentable como algunas empresas con tal de hacer más negocio siguen saturando los destinos sin considerar si se cuenta con toda la infraestructura necesaria. Uno se da cuenta, cuando existe cierta escasez en la zona y la empresa no la tiene, o peor aún, cuando en algunos establecimientos se empieza a oír que existe una falta de insumos para poder operar.
 

Datos a considerar


Si uno revisa la ocupación anual de algunos destinos y en su conjunto, la ocupación anual oscila en un 60% máximo. Es cierto que en ciertas temporadas la ocupación es del 100%,

 
por lo que las empresas deben de buscar estrategias para equilibrar la ocupación de una manera mucho más pareja y de esta manera evitar seguir construyendo y destruyendo zonas que no lo requieren como tal. ¿Para qué construir nuevos hoteles cuando la ocupación del destino en promedio anual es de un 50, 60%? ¿Realmente se necesita?
 
No se trata de abrir por abrir espacios para poder vender más, sino ser conscientes de lo que implica un nuevo establecimiento, implica generación de agua y de energía, de dónde se va a obtener esta, compra de productos gastronómicos para poder atender a los miles y miles de comensales. ¿Se tendrá el suficiente abastecimiento para todos? El tener a más huéspedes y comensales por fuerza va a generar una mayor contaminación, ¿tenemos la capacidad y la infraestructura de solventar esta situación?
 
En países como Suiza, entendiendo que es un “país primer mundista”, una empresa no puede construirse y establecerse si no presenta un plan ambiental de apoyo a la comunidad. Esto es en una comunidad en dónde quiera establecerse un hotel o restaurante ellos deben de ser responsables de incluir en su establecimiento una planta tratadora de agua, para evitar la contaminación de las aguas en la comunidad. Además deben tener un plan ambiental para la separación de basura, la cual por cierto cuenta con más divisiones que la simple orgánica e inorgánica. Se tienen que generar acciones serias que permitan cuidar realmente el medio ambiente.
 
Para los establecimientos turísticos debe ser una obligación encontrar todas las acciones sociales que le permitan apoyar a la comunidad, en lograr tener un mejor ambiente y una mejor relación. Contar con una infraestructura que le permita el menor daño posible y por ende una mejor relación con la comunidad. Incluir a la comunidad en los diferentes proyectos, apoyarlos y no alejarlos a la miseria.
 
A su vez, es fundamental hacer partícipe a los colaboradores e inclusive a los huéspedes y comensales. Crear una consciencia en cada uno de ellos de la cantidad de agua y energía que se desperdicia, que al final del día se convierte en costos que el huésped pagará tarde o temprano. Por su parte crear conciencia en los comensales de los restaurantes, especialmente cuando éstos sirven buffets, que los comensales aprendan a servirse aquello que realmente consumirán para de esta manera evitar tanto desperdicio de alimentos. Nuevamente todo ello en beneficio de los comensales, ya que el costo que se genera del desperdicio de alimentos lo pagará el comensal. Tenemos que crear campañas serias de concientización y alejarnos de un me vale.
 
Si uno analiza el desperdicio que se genera de agua, energía y alimentos en un hotel – restaurante, se explica uno por qué el alto precio de los productos. Las empresas podrían reducir sus tarifas y precios o generar mayores utilidades si aprendieran a ser más cuidadosos con el ambiente y con los recursos naturales. El análisis de los costos es vital en el buen funcionamiento de las empresas. Pero también las decisiones que se tomen en para la operación de los mismos pagarán sus dividendos en algún momento.

 
Las empresas deben ser mucho más responsables en asumir todas las acciones necesarias para poder cuidar los recursos naturales con los cuales operamos día a día, ya que éstos son limitativos y sin éstos no tendremos clientes a los cuáles atender. No sirve saturar en desmedida los diferentes destinos, no sirve, generar monstruos de hoteles o restaurantes con un sin número de cuartos o mesas si no se cuenta con el agua o la energía eléctrica o los alimentos necesarios para brindar el servicio. Aprendamos a trabajar con los recursos que nos dé el destino. En los restaurantes usemos los productos locales y tratemos de “importar” lo menos posible, ello ayudará a que la población también crezca. En los hoteles bien se puede utilizar la mano de obra local con una buena capacitación. Calidad en el servicio la tienen únicamente hay que orientarlos a hacer bien las cosas.
 
Es bueno contar con ahorradores de agua o luz que regulen de una manera u otra el consumo del mismo. Es bueno tener medidas para cuidar los alimentos sacando el mayor provecho de cada uno de ellos, pero nunca a costa de los huéspedes o comensales. Pero de nada sirve si en las oficinas de los directivos se queda la luz prendida o en los restaurantes el desperdicio de alimentos no importe. Con pequeñas acciones podemos generar grandes logros.
 
Si queremos tener un establecimiento que se merezca estrellas, diamantes, tenedores o reconocimientos nacionales o internacionales seamos completos en nuestro quehacer. Si falta alguno de los puntos importantes que contempla la responsabilidad social, los establecimientos hoteleros o restauranteros no deberían de ser galardonados, sin importar que sean extraordinarios en su servicio o en la calidad de sus instalaciones, productos, etc. De qué sirve si no son socialmente responsables, si no cuidan el medio ambiente, si no cuentan con inclusión laboral, si no ven por sus colaboradores. Se los dejo a su consideración. Los reconocimientos únicamente sirven para poner tarifas o precios más altos.
 
No sirve de nada ser parcialmente responsable. O lo somos o no lo somos. No entiendo cómo pueden presumir las empresas de ser “grandes” cuando la gran mayoría infringe con lo establecido por la ley (en el destino que sea), se quejan de que no hay suficientes clientes o que la situación del país es mala, cuando ellos no hacen nada por mejorar y sobre todo abusan de los huéspedes o comensales y para terminar de rematar, presumen que son socialmente responsables.
 
En fin, les dejo mi opinión, pero como quien dijera alguna vez, quien es libre de pecado que tire la primera piedra.


Más información:

Mtro. Alexander Scherer Leibold

Maestro de la Facultad de Responsabilidad Social

ascherer@anahuac.mx